Torre de Astronomía

La luna se veía gigante esa noche, era de las pocas ocasiones en las que podía disfrutar de la tranquilidad y la soledad del castillo, cosa que no sucedía muy seguido, me gustaba escabullirme por ocasiones en lugares que sabía no estarían tan llenos, y mucho menos a esta hora. La astronomía siempre me había fascinado, el poder estudiar las estrellas era solo una excusa para poder verlas y contemplarlas.

Simplemente me quede pensando en lo que me esperaría este nuevo año, cambiando de ambiente, del colegio a la universidad, intentando seguir subiendo escalones para enorgullecer a mis padres, sabía que esperaban mucho de mí, algo que me sometía a mucha presión en ocasiones pero que al final sabía que me ayudaría a seguir adelante. Los pensamientos seguían rondando por mi cabeza cada vez mas grandes y con muchas dudas.

La morena bufa molesta mientras se cubre mejor con su capa de color oscuro, los nervios del nuevo ciclo escolar, de comenzar su carrera y de conocer nuevas personas se hacían presente cuando por fin se encuentra caliente entre las sabanas de su cama impidiéndole dormir, después de dar vueltas por media hora y ver el techo de la cama por otra más decidió dar una vuelta por el castillo para ver si lograba despejarse, en su fuero interno sabe que lo hará bien y que a muchos de sus nuevos compañeros mínimo los abra visto en alguna clase durante su educación secundaria en el castillo, por lo que la frustración de no poder dormir la invadía.

Sin darse cuenta realmente termina en la torre de astronomía, le encantaban las vistas de los terrenos del castillo desde las torres y la de astronomía era una de las mejores para eso, sube las escaleras con paso calmo y al llegar arriba se da cuenta que ya hay alguien allí – La luna se ve enorme desde aquí – comenta acercándose al chico al que no reconoce,

Ve lo quieto que queda el chico por sus palabras pero lo ignora, debe haberlo sorprendido con su llegada, no es usual que varias personas se encuentren recorriendo los pasillos en la noche el mismo día, a menos que sean profesores esperando atrapar a niños y jóvenes fueras de sus camas. La torre de astronomía es un lugar que invita a pensar y a despejar problemas, y es lo que está buscando allí la morena.

Asiente a lo dicho por el chico, el astro nocturno se muestra orgulloso esa noche - Erzsébet Stark, el gusto es mío – se presenta igualmente mirándolo de reojo, para luego acomodarse a su lado mirando la duda – ¿Insomnio? – pregunta con curiosidad.

La chica se acercó y escuche su nombre, supuse que era momento de empezar a conocer nuevas personas, ya que muchos de mis amigos de colegio habían decidido terminar sus estudios hasta ese momento, y apenas unos pocos continuaban, era una pena, ya que con algunos pasabamos grandes momentos que podían seguir si estuvieran en el castillo. Escuche la pregunta que había hecho mientras la respondía en mi mente, el insomnio había sido un fiel acompañante en muchas ocasiones, y era bastante oportuno en momentos de examenes finales donde el sueño era el enemigo.

-En parte, además que me gusta venir acá de vez en cuando, me permite pensar con claridad -dije con tranquilidad -.Puedo agregar el hecho de que esta vista no se puede tener a cualquier hora del día, y mucho menos con tanta gente corriendo por los jardines. ¿Que te trae a ti por acá? -le pregunté

Su mirada sigue puesta en el chico para luego volver al cielo nocturno, una de las cosas que más le gustaban del colegio era como se veía el cielo nocturno, normalmente los días sin nubes se podían ver perfectamente las estrellas y la luna por lo que parecía un enorme manto oscuro salpicado, le recordaba a las pocas noches despejadas que había en su hogar cuando no había nieve cayendo.

- Tienes que venir los días de lluvia, se ve todo totalmente distinto – la ojimarrón lo había hecho en un par de ocasiones, además de encantarle estar bajo el agua de las nubes la vista era impresionante, y no solo de esa torre, sino de cualquiera de las del colegio. – En mi caso el insomnio y la ansiedad se han unido – se encoge de hombros – supongo que me sucede siempre que comienzo un nuevo ciclo escolar, también me sucedía cuando iba a comenzar algún curso en el colegio.

La escuchaba atentamente y lo que decía era bueno, en alguna ocasión había visto el paisaje lluvioso, lo que siempre me producía una pequeña tranquilidad, no era el tipico chico que le gustaban los días soleados, prefería el clima fresco y agradable, la lluvia siempre lo hacía mejor. En ocasiones en el colegio solía ir a los terrenos a mojarme, la primera vez habia terminado con un gran resfriado, pero había valido la pena pasar el rato de diversión.

-Tienes razón, debe de verse impresionante, sobre todo ver a la gente corriendo para buscar refugio, aunque yo soy de los partidarios de quedarse bajo la lluvia -dije sonriendo - La ansiedad la comparto también, creo que en este caso es un poco mayor, la universidad es un tanto mas intimidante que el colegio, aunque tiene que ser igual de divertido o incluso mas, o al menos eso espero -agregué recordando a mis amigos, los cuales no habían continuado.

- Pensé que era de las pocas personas que le gustan mojarse bajo la lluvia – le sonríe al chico volteando a verlo – Se hacer la poción pepperup de memoria únicamente por tener que hacerla tanto para los resfriados que me pegaba al quedarme mojándome – le cuenta recordando los regaños de sus amigas al verla llegar mojada – Podemos escaparnos cuando llueva y compartir la diversión – dice imaginándose a ambos en los terrenos empapados.

Hogwarts siempre había sido más un hogar para Erzs que la mansión Stark, pasaba más meses del año en el antiguo castillo que en su hogar en Rusia por lo que más de una vez había pensado en no regresar a casa en los veranos o periodos vacacionales, incluso le había pasado por la mente iniciar una búsqueda para un hogar en Inglaterra, lo único que la había detenido siempre fue la nostalgia por su abuelo y que algún día no lo tendría más con ella, por eso seguía volviendo a la fría mansión. – Eso espero – asiente a sus palabras con algo de ilusión en su mirada – Sobre todo porque seguimos estando en Hogwarts, un lugar que siempre es especial.

- Varios de mis amigos siguieron los pasos de los tuyos, pero tuve la suerte de que un par siguieran en el colegio – le dice riendo junto a él recordando las conversaciones en la sala común los últimos días del año, cuando su grupo de amigos se sentaba frente a la chimenea incluida ella y planeaban lo que harían al graduarse del colegio – Me gusta estudiar y aprender, siento que puedo sacar más provecho de la universidad que yéndome directamente a trabajar o entrando a algún aprendizaje. – también estaba el hecho de que aún no estaba preparada para volver a vivir en San Petesburgo con sus padres ignorándose o peleando entre ellos o su abuelo tratando de que pareciera todo normal. – ¿Tu porque seguiste aquí?

Había pasado un momento en silencio mientras me hacía la misma pregunta que ella había dicho, en mi mente pasaron miles de opciones de las que podía responder, pero al final sabía que solo una era cierta, y no dudaba que todo estaba claro para mi mente que en ese momento estaba procesando mucho.

-Creo que mis padres me inculcaron eso ¿sabes? mi madre siempre me alentó para que siguiera estudiando, creo que porque esperan grandes cosas de mi, eso a veces, puede ser un tanto estresante, en muchas ocasiones han dejado caer un gran peso sobre mí -dije rápidamente sin saber como había salido eso de mi boca, eran pocas las veces en que yo hablaba sobre mi familia o que me sinceraba tan rápidamente con alguien que acababa de conocer -.Perdón, a veces digo las cosas sin pensarlas -dije un tanto apenado.

Miraba hacia el cielo de nuevo pensando en todo lo que mis padres habían dicho antes de venirme, era una gran presión la que sentía en muchas ocasiones, claro, había tomado la buena decisión de querer seguir estudiando porque aspiraba a mucho, pero el hecho de que mis padres esperaban aún mas, era un tanto abrumante ya que no quería decepcionarlos.

-Hay ocasiones en las que el cielo nocturno me pone demasiado pensativo, es como si me afectara igual que a los hombres lobos, aunque no sea luna llena -dije riendome tratando de olvidar un poco lo que había dicho antes.

Se le queda mirando mientras ve su indecisión al responderle, la morena se preguntaba si el chico no estaba realmente seguro del porque seguía en el colegio, varias opciones se barajeaban por la mente de la chica, podía haber vuelto por un impulso, por obligación o por alguna otra extraña razón, pero tener que estudiar tanto tiempo algo que no querías sin opciones era horrible y esperaba que no fuera esa la opción acertada.

- No te preocupes – le dice, ella entiende que a veces el silencio y la tranquilidad y el hecho de estar frente a alguien que no te conoce y que por lo tanto lo más probable es que no te juzgue más que por lo que le cuentes en el momento logren que quieran sincerarte o haga que digas cosas profundamente guardadas – Entiendo en parte eso, yo soy hija única, la heredera de mi familia y eso supone mucho peso en mis hombros, seré la que le dé el peso del apellido en el futuro y actualmente con mis acciones y eso es muchas veces abrumador – Así tuviera muchos problemas en su hogar, seguía siendo la heredera Stark y debía dar la cara y el estatus al apellido desde su nacimiento o la ahorcarían cuando volviera a casa. – Igual tienes que preguntarte si el estar aquí te agrada, si te sientes bien al tener que volver aquí – era su vida, y tenía que tratar de adaptarse a la nueva situación, es lo que ella siempre trataba de hacer.

- La noche puede ser una gran consejera, mientras todos duermen los insomnes como nosotros les preguntamos sus secretos, para poder aclararnos, a mí me pone algo poética y me inspira en lo que esté haciendo, por eso muchas veces duermo poco – ella también estaba algo habladora esa noche, no era muy común en ella.

Asentí al escucharla, por fin encontraba alguien que me podía comprender, en muchas ocasiones no podía hablar de nada sobre eso porque simplemente la gente me miraba extraño, escuche lo que decía sobre si debía seguir aquí y aclaré mi mente.

-La verdad es que el colegio fue divertido, lo admito, es como si estas paredes te mantuvieran seguro y lo pudieras llamar hogar. Además que quiero obtener un buen trabajo, no es por nada, pero deseo comprar mi mansión lo mas pronto posible - dije riendo. El obtener muchos galeones era algo que llamaba la atención claro. Además del hecho de querer ser un buen estudiante, estaba el poder costearme todo lo que quería sin tener que estar a expensas de mi familia. - . No es que sea un avaro, lo aclaro, pero creo que todos queremos tener nuestros lujos.

sonreí al escuchar lo ultimo que decía acerca de la noche y ver cuanta razón tenía.

-Te comprendo a la perfección, en la noche mi mente se acelera, el momento en que mi cabeza se pone en la almohada y entonces empieza a maquinar mil cosas, creo que el mundo no quiere que duermas -agregué mientras la miraba y pensaba en las muchas ocasiones en que a pesar de estar cansado, por mi mente pasaban tantas cosas que al final no podía dormir por pensar en cada vez mas cosas y posibilidades a muchas preguntas que me hacía.